Realizada para El Pequeño Pais, se publicó serializada a razón de dos páginas semanales entre 1992 y 1996. J.M.Beroy realizó varias historias de los personajes (dos historias de 40 pgs y otra de 12 páginas). El propio autor seleccionó una de ellas (la segunda historia de 40 pags) para este álbum, publicado por BDBanda con fecha de junio 2006.El álbum, de tapa dura y 56 pgs a color, se compone de 40 páginas de historieta realizadas de forma que cada página fuese semi-autoconclusiva -debido a su publicación serializada original-, más una entrevista con el autor, una sección de 'cómo se hizo', una versión desechada de la página 3, bocetos y dos relatos breves sobre los mismos personajes, "Un pacto es un pacto" (escrito por Toni Guiral) y "¡Misterio en los canales! (escrito por Josep Maria Polls).
Con un humor cercano a 'Mortadelo y Filemón' -Beroy no oculta su admiración por la obra de Ibáñez- pero con mucha menos mala leche (no olvidemos que es un tebeo infantil) y un dibujo influído por la 'linea clara' de la escuela franco-belga, el autor nos sumerge -consciente o inconscientemente- en su subconsciente, a través de pequeños homenajes que no deben pasar desapercibidos y cuya búsqueda e identificación suponen una auténtica diversión: 'Metrópolis' de Fritz Lang, 'The Wall' de Pink Floyd ¿Mi consejo? Compradlo como regalo para cualquier niño y aprovechad para leerlo; aunque quizá cuando terminéis no queráis desprenderos de él.
5 comentarios:
Confirmo también lo de The Wall :))
Yo compraba El País para leer estos detectives audaces (y "La Biblioteca de Turpin" del Gran Max, y LOrenzo Diaz también hacia algo...¿con Machuca?), disfrutar del divertido guión, más Franquin de Spirou que Ibañez de Mortadelo (pienso)y del inmenso dibujo. Lástima que no esté debidamente recopilado. Aún tengo pendiente la compra de esta selección, un día de estos, un día de estos.
Un saludo
Seguro que tiene 150 influencias más, pero esa es la que más me salta a la vista porque yo he leído mucho Mortadelo..
Lo mejor de el pequeño el País es, sin duda, Garfield.
Sin ir más lejos el de este domingo era buenísimo: patada clásica a Odie al borde de la mesa pero con los achaques de la edad de por medio.
Aunque las historietas eran muy blanditas y, según mi madre, yo ya era mayor a para andar leyendo "tontadas de críos", recuerdo esos cómics con mucho cariño. Eso sí, la niña gafotas era de una pedorrez inconmensurable.
¡Besicos, Bruss!
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