"(...) Observando la cuestión desde la perspectiva de los últimos 20 años, se puede decir que se escriben cuatro tipos de ensayo sobre el comic: (I) sobre el comic como medio en general; (II) sobre los comics o sobre un comic en particular como síntoma sociológico; (III) sobre un comic cualquiera como si se tratase de La Ilíada; (IV) sobre un comic en particular, sabiendo que pertenece al medio-comic, y a algún género practicado a través de este medio, pero 'olvidando' que es un comic (...)
El cuarto tipo: (...) En principio, repito, nos olvidamos del medio porque nos movemos en él como peces en el agua. Por lo tanto estamos exentos de cualquier obligación apologética acerca del medio, y analizamos la obra singular por lo que es, como ejecución particular de un arte (o de una técnica) que ya no se pone en discusión (al menos no en primer plano ni en primera instancia). Este tipo de ensayística, por lo que respecta al comic, es bastante reciente. Había que esperar dos eventos, no necesariamente contemporáneos: (i) que el comic alcanzase la mayoría de edad, (ii) que la critica del comic alcanzase la mayoría de edad. El primer evento es bastante remoto (aunque sólo en los últimos 20 años el comic se ha vuelto, más que adulto, docto, culto, sofisticado, metalingüístico, experimental). El segundo evento es más reciente, porque la crítica era adolescente cuando muchos comics eran ya mayores de edad. Hablar de comic adulto no significa sólo hablar de evolución de lenguaje, de temas, de géneros. Significa hablar de una proliferación de tendencias, y de niveles, por lo cual se puede hablar de comic como se habla de literatura escrita: forman parte de la literatura escrita Blanchot y Dard, igual que forman parte del cine las viejas películas de Eddie Constantine y Godard. Para hacer crítica de cuarto tipo se debe olvidar que existe un género llamado comic."
El cuarto tipo: (...) En principio, repito, nos olvidamos del medio porque nos movemos en él como peces en el agua. Por lo tanto estamos exentos de cualquier obligación apologética acerca del medio, y analizamos la obra singular por lo que es, como ejecución particular de un arte (o de una técnica) que ya no se pone en discusión (al menos no en primer plano ni en primera instancia). Este tipo de ensayística, por lo que respecta al comic, es bastante reciente. Había que esperar dos eventos, no necesariamente contemporáneos: (i) que el comic alcanzase la mayoría de edad, (ii) que la critica del comic alcanzase la mayoría de edad. El primer evento es bastante remoto (aunque sólo en los últimos 20 años el comic se ha vuelto, más que adulto, docto, culto, sofisticado, metalingüístico, experimental). El segundo evento es más reciente, porque la crítica era adolescente cuando muchos comics eran ya mayores de edad. Hablar de comic adulto no significa sólo hablar de evolución de lenguaje, de temas, de géneros. Significa hablar de una proliferación de tendencias, y de niveles, por lo cual se puede hablar de comic como se habla de literatura escrita: forman parte de la literatura escrita Blanchot y Dard, igual que forman parte del cine las viejas películas de Eddie Constantine y Godard. Para hacer crítica de cuarto tipo se debe olvidar que existe un género llamado comic."
-Umberto Eco: 'Quattro modi di parlare di fumetti'-
(Otro intelectual infantiloide que no estaría de acuerdo con Molina Foix)
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3 comentarios:
No tengo nada que añadir a lo dicho por Umberto Eco. Lo ha explicado muy bien. Yo, aunque haya quién se escandalice a esta altura, considero el cómic al igual que la literatura. Creo que poner límites a eso es absurdo.
Gran documento para mostrarle a Molina Foix!.
Me encanta lo ordenado que es este hombre... I, II, III, (i), (ii),...
Qué lástima para el ilicitano que haya tanto intelectual infatiloide!.
Pues sí, totalmente, la legión de intelectuales infantiloides atacaaa,xD.
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