jueves, 2 de julio de 2009

Entrevista a... Jason

Publicada en 2 partes en The Daily Cross Hatch, el 16 y 23 de Junio.

Pocket Full of Rain fue publicado por Fantagraphics recientemente; finalmente nos mostró tus orígenes como artista. ¿Sentías que tenías que luchar para crear un estilo propio?

Sí. Me llevó un tiempo. Mis primeros trabajos fueron en estilo realista. Me llevaba mucho tiempo y no estaba contento con el resultado. En los dos primeros números de mi comic, Mjau, Mjau, estaba probando estilos diferentes y los personajes animales encajaban bien con las historias que quería contar. Son como fábulas. Ese es el estilo que seguiré usando, de momento.

¿No crees que habrá un punto en que probarás algo diferente?

Bueno, si hay una historia en la que me parece que los personajes animales no encajan, podría volver a un estilo más realista, pero no creo que pase. Creo que se puede hacer todo tipo de historias con ese estilo. Como Maus. Se hizo con personajes animales. No veo la necesidad de cambiar el estilo, hasta que me aburra de él.

Maus es un caso especialmente interesante, con la yuxtaposición de personajes animales y una historia real tan brutal. ¿Por qué crees que esos personajes encajan tan bien con tu narrativa?

Creo que de alguna manera son más universales y más humanos. Creo que cualquiera puede identificarse con un personaje animal. Creo que por eso hay personajes tan populares como el Pato Donald y Mickey Mouse. Todo el mundo puede identificarse con ellos.

Cuando leo tus comics tengo la impresión de que eres un ávido cinéfilo, especialmente películas de género como westerns y cine negro.

Sí. Necesitaba un nuevo hobby. Durante mucho tiempo los comics fueron mi hobby. Ahora es mi trabajo. Tenía que hacer algo más por las noches. Me gusta ver películas. Toda clase de películas, sobre todo antiguas, años 30, 40, 50, hasta los 70. Por alguna razón las modernas no me atraen tanto. Creo que la MTV las estropeó.

¿Eres capaz de calibrar la influencia de esas películas en tu obra?

A menudo extraigo ideas de las películas. Why Are you Doing This está claramente influenciada por las películas de Hitchcock. El Último Mosquetero es una mezcla de las películas de Flash Gordon y la novela Los Tres Mosqueteros. Los Vivos y los Muertos está influenciada por las películas de zombies. Es divertido juntar diferentes géneros y hacer algo nuevo, para verlo desde un nuevo ángulo, que es algo más que un simple pastiche. Low Moon es un western clásico en algunos aspectos.

Excepto porque beben capuchinos.

Sí, sí, y hablan por el móvil. El juego de ajedrez al final, en lugar del duelo.



¿Te interesa hacer películas?

No. No sé liderar a la gente, como tiene que hacer un director. Tiene que ser muy extrovertido, los dibujantes son a menudo más introvertidos. Al menos yo.

¿Y escribir un guión?

No, no.

¿No te gusta la parte colaborativa?

No, te corrompes un poco haciendo comics, teniendo el control total. Creo que es el medio que mejor me va.

¿Alguien te ha propuesto adaptar alguno de tus comics?

La gente ha mostrado interés en hacer versiones fílmicas. Se ha comprado la opción de uno de los comics, I Killed Adolf Hitler. Pero no estoy aguantando el aliento. Si ocurre, ocurre. Parece un pequeño milagro cada vez que se hace una buena película, sobre todo en Hollywood.

En especial de un comic.

Sí. De vez en cuando ocurre, pero sí.

Si I Killed Adolf Hitler llega tan lejos, te sentirías obligado a implicarte en la realización de la película?

Supongo que me interesaría leer el guión y comentarlo. Si dijese, “sólo dame el dinero y haz lo que quieras,” no tendría derecho a criticarla luego.

La postura de Alan Moore.

Sí. No estoy seguro de que tenga derecho a criticar las películas, ya que para empezar nunca ha tenido interés en ellas.

¿Lees muchos comics?

Ultimamente menos.

Has estado muy ocupado.

Cuando estás sentado dibujando comics todo el día… de momento leo sobre todo tiras antiguas, como Little Orphan Annie, Walt & Skeezix, Polly and Her Pals y Terry & the Pirates.

¿Te preocupa que leer comics más modernos influya en tu obra?

Ya no. Creo que mi estilo está bien asentado por ahora. Cuando busco ideas voy a todos los sitios excepto a los comics, como películas, libros, y la vida, pero no los comics. Obviamente, mi forma de dibujar está muy influenciada por los comics, sobre todo Tintin, el estilo de línea clara.



Te inspiras en la vida ¿puedes señalar alguno de tus comics que sea más autobiográfico que los otros?

Creo que Hey, Wait… es probablemente el más cercano a mi vida, sobre todo la parte de la infancia, aunque también la parte adulta. Está muy influenciado por el período en que trabajé en una fábrica de muebles. Pero incluso haciendo historias de género, como ciencia ficción o crímenes, no se puede evitar poner algo de tí en la historia. Sería imposible no hacerlo. O al menos no sería un buen comic.

¿Tus primeros trabajos eran más autobiográficos que los de ahora?

No, la autobiografía no me gusta mucho. Hice un poco en un período en que parecía que todo el mundo lo hacía. Quería intentarlo en un par de historias cortas. He hecho muy poco.

La gente suele hacerlo mucho al principio.

Sí, es la elección obvia para contar tu propia historia – David B con Epileptic y Satrapi. Han salido muy buenos comics de ahí. Pero si dibujas un comic sobre un tipo que dibuja un comic, puedes cruzar la línea.

Satrapi ha tenido obviamente una vida fascinante. ¿Crees que tus propias experiencias no darían para hacer un comic interesante?

No creo que tengas que experimentar una vida interesante o algo muy notable por fuerza. Uno de mis comics autobiográficos favoritos es I Never Liked You, de Chester Brown, que es...

Una post adolescencia suburbana muy tradicional.

Sí, sí, creo que sí. Pero es muy interesante, porque puedes identificarte con esa época de niñez y adolescencia. Todo el mundo ha pasado por ese período.

Se puede hablar de la naturaleza universal de la autobiografía.

Sí, sí.

Has dicho que trabajaste en una fábrica.

Sí. Después del instituto hice el servicio militar, un año. Y luego estuve buscando trabajo. Trabajé nueve meses en una fábrica de muebles y eso me hizo decidirme a continuar con mi educación.

¿Lo odiabas?

Sí, sí. Lo odiaba de verdad. Así que me apunté a la Escuela de Arte. Resultó no ser muy diferente, claro.



En EEUU—hasta hace poco—ha habido un gran estigma sobre hacer comics en la Escuela de Arte. No se cree que sea muy académico, es para niños. ¿También pasa en Europa?

Sí, es igual en Noruega. Se considera a los comics un medio para niños. Pero ha cambiado sobre todo en los últimos 15 años. Lo importante es que es muy difícil ganarse la vida haciendo comics en Noruega. Hay sólo cuatro millones de habitantes, así que el mercado es muy pequeño. Creo que por eso en la Escuela de Arte no había muchas posibilidades de aprender sobre comics. Había un curso de 3 semanas que los enseñaba.

¿Hay una pequeña comunidad comiquera en Noruega?

Sí. Hay un par de comunidades. Mi primera editorial fue Jippi. Un grupo de nosotros nos reuníamos para dibujar y hablar de comics. Y compartí estudio con algunos de ellos en Oslo, pero desde que me vine a Francia no sé lo que está pasando allí. Ahora hay una nueva generación de dibujantes noruegos. Como los Dongery.

¿Por qué te fuiste a vivir a Francia?

Me cansé un poco de Oslo. Había vivido allí catorce años. Quería estar más cerca de la industria francesa del comic. Quería vivir de los comics, y es muy difícil en Noruega. Esa es la razón principal.

¿Es una comunidad mucho más grande? Obviamente hay una gran tradición en Francia.

Sí, hay una gran tradición. El mercado es mucho más grande. En Noruega hay nueve o diez personas que se ganan la vida haciendo comics, mientras que en Francia son cientos.



¿Vivías de ello mientras estabas en Noruega?

Más o menos. Tenía que hacer algún trabajo de ilustración y otras cosas, para pagar el alquiler. Después de la Escuela de Arte, hubo un período de siete u ocho años de lucha.

Pagando deudas.

Sí, exacto. Finalmente, en los últimos cinco o seis años he obtenido buenos ingresos de los comics.

Cuando recorriste una lista de comics que te influyeron, mencionaste varios artistas americanos. ¿Ha tenido un gran impacto en Europa el comic de aquí?

Sí, el comic alternativo de los 80 y 90 como Dan Clowes, Chris Ware, los Hernandez Brothers, creo que ha sido una influencia para los europeos. El comic francés ha sido tradicionalmente un comic de aventuras, agentes secretos y esas cosas. Pero hay comics de L’Association, como David B., Lewis Trondheim, que han sido influenciados por muchos comics americanos alternativos, y que me parecen más interesantes que el viejo comic francés de aventuras.
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4 comentarios:

Ismael Sobrino dijo...

Ya tengo una lectura gratuita de este dibujante al alcance de la mano, así que dejo la entrevista para la próxima semana.

Crowley dijo...

Un gran autor a tener muy en cuenta. Muy interesante. Nunca aburre.
Saludos
Nos leemos

Ismael Sobrino dijo...

Tienen El último mosquetero, En pocas palabras, No me dejes nunca, ¡Chhht! y Berlín

¡¡¡Jejeje!!! Jujujujuju... ¡Jejeje! ¡Otra vez el mundo en mis manos!

PAblo dijo...

Interesante entrevista.

Impacientes Saludos.